Este primer ítem es muy importante ya que puedes ahorrarte mucha frustración y mal humor si cuestionas tus suposiciones y te preguntas sobre ellas en vez de tomarte personal el comportamiento de tu pareja. Muchas veces, nos sucede que tendemos a hacer suposiciones y la mayoría de las veces juramos que es cierto o real lo que suponemos. Hacemos suposiciones sobre lo que mi pareja piensa o hace, lo tomamos personal, y después, culpamos y reaccionamos enviando veneno emocional con nuestras palabras. Toda la tristeza o frustración que se experimenta tuvieron su raíz en las suposiciones que hicimos. 

Por ejemplo: mi marido llega a casa del trabajo con una expresión en el rostro de tristeza, yo lo estaba esperando muy ansiosa para contarle una gran noticia que me había enterado, al contarsela noto que el continua con el rostro triste e inmediatamente supongo que no le interesa lo que le estoy contando y me enojo de inmediato diciéndole que estoy cansada que nunca puedo contar con él para nada, que no comparte mis alegrías, por lo que mi marido en vez de contarme porque estaba triste se aísla más y actúa más esquivo.

Este ítem busca hacerte responsable por lo que piensas y sientes, reconociendo que tus creencias y opiniones no son la verdad absoluta. Hablar en primera persona ayuda a que tu pareja esté más receptiva para escucharte. en vez de empezar tus oraciones com un vos, tu o usted, lo cual puede sonar acusatorio y pone al otro a la defensiva, si empiezas hablando de ti es posible que la otra persona esté más receptiva al escuchar.

Cuando vas a expresar cómo te sientes, hazlo haciéndote responsable por lo que sientes, sin culpar a tu pareja por tus reacciones emocionales. Esto implica expresar tus emociones en primera persona, usando frases como: 

• me siento feliz 
• me siento solo
• me siento tranquilo
• me siento molesto/a
• me preocupa

De esta forma no culpas a tu pareja por lo que sientes y en realidad no se siente atacado/a ni reacciona por defecto a la defensiva. 

Cuando utilizamos adjetivos que descalifican a las personas, ten por seguro que se sentirán atacadas, lo cual hace que se despierten respuestas automáticas como huir o atacar. Por ello este ítem propone que en vez de juzgar hables sobre el comportamiento de tu pareja y el impacto que este produce, es decir, que describas comportamientos específicos y observables en vez de emitir juicios de valor que descalifican.

Cuando vas a hablar del impacto negativo que las acciones de tu pareja genera en ti y estos no son hechos observables, hazlo en primera persona, para dejar en claro que estás expresando tu percepción y no una verdad absoluta. 

Para ello, la fórmula es expresar la acción de tu pareja sumado a la consecuencia observada por ti desde tu perspectiva, sumándole una pregunta que demuestra interés y valida la percepción de tu pareja